Menú del Día: Pote Gallego, Rodaballo al horno, melón, copa y puro
El presidente del PP en Ourense, Xosé Luis Baltar, comunicó anoche a Manuel Fraga su intención de abandonar el PP gallego y llevarse al menos a siete de sus ocho diputados. De confirmarse la escisión, Fraga perdería la mayoría en el Parlamento. Detrás de esta gravísima crisis interna está el peso que los afines a Rajoy han ido ganando en el partido. El secretario general del PPdeG, Jesús Palmou, considera esta información "una mera especulación".
................................................
Si esto es verdad, el desmembramiento del Pp está comenzando. Siempre se ha tenido al PP gallego como uno de los más sólidos, regido por Fraga ha sido espejo donde mirarse las demás federaciones nacionales del partido. Quizás demasiado ejemplo. También es sabido que la nueva presentación de Fraga como candidato a la Xunta no ha sido bien vista por gran parte del partido aunque se le haya apoyado la boca chica era ostensible.
Fraga representa el sector más carca, la vieja guardia de camisas negras, ese sector que se defiende con uñas y dientes contra un futuro inexorable y es que el tiempo lo puede todo y ni Fraga se puede escapar al paso de éste. La nueva voluntad que comienza a surgir en el Pp parece que ha tomado carrerilla, los que han sabido adivinar que la debacle electoral del Pp estaba más allá del fatídico atentado de Madrid.
Y es que el Pp también se viste de un nuevo talante y está deseando que los viejos estandartes sean bien envueltos en sus viejos pendones predemocráticos y si es posible que ni siquiera se les dote de naftalina para preservarlos del inexorable Tiempo. Pero esta lucha se deja adivinar como difícil y que va a costar un alto número de víctimas políticas y si no se andan con talento puede hasta costarle la existencia misma del partido.
Otros vienen detrás empujando, en principio tímidos y con bastante miedo, otros a los que sus mismos compañeros no paran de ponerles zancadillas, que se lo pregunten a Gallardón, pero en su nimiedad los pasos son gigantescos. Pero ya deberían de haber aprendido que, por escarnio ajeno, las vacas sagradas, con el tiempo, no hacen nada más que dificultar el avance, el progreso natural de cualquier partido.
Que el PP también tiene un sector progresista, por fuerza, se ha dejado entrever desde hace tiempo pero se han empeñado en reafirmarse en sus posiciones acallando voces discordantes sin pensar o queriendo retardar lo máximo posible que estas discordancias fueran públicas y notorias. Y es que el Pp tiene un gran handicat, lo que le ha hecho llegar a las posiciones que ocupó durante ocho años, la unión en un solo partido de todo la derecha española, ahora que no hay botín a repartir pugnan, todos, por salvar su culo.
Ya no hay una figura clave en torno a la cual arremolinarse, Rajoy no tiene el carisma suficiente para ejercer el papel; Fraga, qué diriamos de Fraga, dejémoslo en que está mayor y Aznar está tan devaluado política y moralmente que el solo nombrar la posibilidad de que volviera a ser candidato a algo hace chirriar los dientes al mismísimo Fraga, vamos que ultimamente la lápida del Cerro de los Caídos parece querer salir disparada de los rugidos que se oyen dentro.
Y cuando ahora llegan los de Ourense pidiendo guerra la cosa se vislumbra complicada pero muy interesante, vamos a tener un otoño-invierno divertido porque se van a ver más de un ojo morado en las filas de la oposición.
................................................
Si esto es verdad, el desmembramiento del Pp está comenzando. Siempre se ha tenido al PP gallego como uno de los más sólidos, regido por Fraga ha sido espejo donde mirarse las demás federaciones nacionales del partido. Quizás demasiado ejemplo. También es sabido que la nueva presentación de Fraga como candidato a la Xunta no ha sido bien vista por gran parte del partido aunque se le haya apoyado la boca chica era ostensible.
Fraga representa el sector más carca, la vieja guardia de camisas negras, ese sector que se defiende con uñas y dientes contra un futuro inexorable y es que el tiempo lo puede todo y ni Fraga se puede escapar al paso de éste. La nueva voluntad que comienza a surgir en el Pp parece que ha tomado carrerilla, los que han sabido adivinar que la debacle electoral del Pp estaba más allá del fatídico atentado de Madrid.
Y es que el Pp también se viste de un nuevo talante y está deseando que los viejos estandartes sean bien envueltos en sus viejos pendones predemocráticos y si es posible que ni siquiera se les dote de naftalina para preservarlos del inexorable Tiempo. Pero esta lucha se deja adivinar como difícil y que va a costar un alto número de víctimas políticas y si no se andan con talento puede hasta costarle la existencia misma del partido.
Otros vienen detrás empujando, en principio tímidos y con bastante miedo, otros a los que sus mismos compañeros no paran de ponerles zancadillas, que se lo pregunten a Gallardón, pero en su nimiedad los pasos son gigantescos. Pero ya deberían de haber aprendido que, por escarnio ajeno, las vacas sagradas, con el tiempo, no hacen nada más que dificultar el avance, el progreso natural de cualquier partido.
Que el PP también tiene un sector progresista, por fuerza, se ha dejado entrever desde hace tiempo pero se han empeñado en reafirmarse en sus posiciones acallando voces discordantes sin pensar o queriendo retardar lo máximo posible que estas discordancias fueran públicas y notorias. Y es que el Pp tiene un gran handicat, lo que le ha hecho llegar a las posiciones que ocupó durante ocho años, la unión en un solo partido de todo la derecha española, ahora que no hay botín a repartir pugnan, todos, por salvar su culo.
Ya no hay una figura clave en torno a la cual arremolinarse, Rajoy no tiene el carisma suficiente para ejercer el papel; Fraga, qué diriamos de Fraga, dejémoslo en que está mayor y Aznar está tan devaluado política y moralmente que el solo nombrar la posibilidad de que volviera a ser candidato a algo hace chirriar los dientes al mismísimo Fraga, vamos que ultimamente la lápida del Cerro de los Caídos parece querer salir disparada de los rugidos que se oyen dentro.
Y cuando ahora llegan los de Ourense pidiendo guerra la cosa se vislumbra complicada pero muy interesante, vamos a tener un otoño-invierno divertido porque se van a ver más de un ojo morado en las filas de la oposición.
0 comentarios